En primer lugar, no puedes perderte el famoso Puente Romano de Cangás de Onís, que data del siglo XIII y es un símbolo icónico de la ciudad. Pasear por este puente y admirar las vistas del río Sella es una experiencia imprescindible.

A pocos kilómetros de distancia se encuentra el Santuario de Covadonga, un lugar sagrado y de gran importancia histórica. Aquí podrás visitar la Santa Cueva, donde se encuentra la Virgen de Covadonga, y disfrutar de la belleza natural del entorno, incluyendo los lagos de Covadonga.

Si te gusta el senderismo y la naturaleza, te recomiendo explorar los Picos de Europa. Desde Cangás de Onís, puedes acceder a rutas y senderos que te llevarán a paisajes impresionantes, como el desfiladero de los Beyos o el famoso mirador del Fitu, desde donde se puede disfrutar de unas vistas panorámicas increíbles.

Además, no puedes dejar de probar la gastronomía local. Asturias es conocida por su deliciosa comida, especialmente sus platos de mariscos y su famosa sidra. En Cangás de Onís, encontrarás numerosos restaurantes y sidrerías donde podrás disfrutar de auténticos manjares asturianos.

Por último, si buscas un poco de relajación, puedes aprovechar la cercanía de Cangás de Onís a la costa y visitar alguna de las hermosas playas de la región, como la Playa de Gulpiyuri o la Playa de Ribadesella.